La psicosis en Lacan. De su Tesis al Seminario III.

En la tesis de doctorado de Lacan, escrita en 1932, “De la psicosis paranoica en sus relaciones con la personalidad”, el psiquiatra fenomenólogo, se introduce en el debate de la época y repiensa la concepción clásica de la psiquiatría, proponiendo una nueva lectura de la psicosis paranoica e introduciendo por primera vez, al menos en Francia, una reflexión sobre la causalidad de la psicosis. El incesante movimiento del pensamiento de Lacan permite observar la continua búsqueda de autoperfección, el antidogmatismo del autor, y su constante deseo de dar una forma más precisa a su propia Tesis.. De este modo, será como de la concepción fenomenológica- compresiva pasará a entender el inconsciente estructurado como un leguaje, concepción de la que es habitual partir para la reconstrucción de su pensamiento y que representa el punto de partida para introducirse a la lectura del Seminario III, al cual es dedicado la segunda parte de este trabajo. Lacan, que desde los inicios de su reflexión intenta dar cuenta de la psicosis en términos de estructura, sólo podrá hacerlo a partir de adquirir los instrumentos necesarios de la lingüística estructuralista de De Saussure y el descubrimiento de las leyes de lo simbólico. Además, oponiéndose a la doctrina orgánica, comienza desde 1932, la investigación de las causas estructurales de la psicosis, que nunca será entendida por él como un déficit del sujeto. Esta posición no cesará nunca en Lacan y la expresará de forma radical solo en el momento en que teoriza la forclusión del Nombre del Padre como mecanismo causal de la psicosis. La psicosis es para Lacan una de las posibles respuestas a la cuestión edípica, una posición del sujeto en la estructura, que se verifica a partir de una falta en el campo de lo simbólico, un simbólico que aparece como un agujero, un vacío a nivel significante. Presentar la forclusión del Nombre del Padre como causa significante de la psicosis, quiere decir operar dentro de una clínica psicoanalítica descentrada del orden imaginario, el cual puede intervenir en la fenomenología de la psicosis.