Staphylococcus epidermidis y otros estafilococos coagulasa-negativos (SCN) constituyen en la actualidad los microorganismos que con más frecuencia se aísla en los hemocultivos de los diferentes hospitales. Forman parte de la flora cutánea y a menudo aparecen como contaminantes en los cultivos de muestras clínicas, pero en las últimas dos décadas se ha producido un aumento del número de bacteriemias por SCN asociado al uso progresivamente mayor de dispositivos intravasculares, siendo en la actualidad la causa más frecuente de bacteriemia nosocomial, especialmente en áreas del hospital en los que es más frecuente el uso de catéteres vasculares. Determinar su verdadera significación clínica continúa siendo motivo de controversia. Durante las tres últimas décadas se han realizado diversos estudios para valorar factores clínicos y microbiológicos que permitan el diagnóstico precoz de bacteriemia verdadera que puede oscilar según las series entre 20-31%. Sin embargo los métodos no están bien definidos, no existiendo en la actualidad un “Gold standard” para el diagnóstico que nos permita diferenciar entre bacteriemia verdadera y falsa.