La obesidad constituye un problema importante en la salud pública a nivel mundial Los factores que de manera reiterada se han identificado como decisivos en el establecimiento de la obesidad infantil y juvenil fundamentalmente son los hábitos alimentarios y la actividad física. En este sentido hay que destacar la influencia determinante de la familia en su configuración. Por ello, ¿Será efectivo un manejo familiar de la obesidad para corregir hábitos y conductas alimentarias respecto a la terapia individual? Así lo confirman los estudios que analizan la relación entre las preferencias y hábitos alimentarios de los padres y de los hijos y distintos trabajos que sugieren que cuando los padres siguen un estilo de vida sedentario, con mayor frecuencia los hijos también lo siguen. Por lo tanto, mejorar hábitos alimentarios y estilos de vida sedentarios en niños con exceso de peso mediante un abordaje familiar a través de un taller grupal se convierte en nuestro objetivo principal.