La epilepsia es una patología que generalmente requiere del uso de fármacos antiepilépticos. Existen varias generaciones de ellos, con distintos perfiles de eficacia, así como de efectos adversos. Entre estos efectos adversos podrían incluirse algunos tales como favorecer la aparición de una dislipemia (hipercolesterolemia, hipertrigliceridemia), el aumento de homocisteína plasmática o el aumento del peso corporal, llevando a la aparición precoz de ciertos factores de riesgo cardiovascular que finalmente podrían propiciar una enfermedad cardiovascular. Se piensa que los fármacos antiepilépticos clásicos podrían contribuir en mayor medida a lo citado anteriormente, aunque con datos dispares, mientras que el efecto de los fármacos antiepilépticos de nueva generación está prácticamente por explorar. Todas estas consideraciones son importantes, fundamentales de cara a prevenir la aparición de problemas añadidos en las personas con epilepsia. Esta obra intenta poner de manifiesto esta problemática con el objetivo de generar en el lector una actitud activa en el conocimiento y manejo de este hecho, lo cual beneficiará sin duda a nuestros pacientes.