La nutrición parenteral (NP) es el tratamiento nutricional que precisan aquellos ciudadanos que están o tienen riesgo de desnutrición y que por diversos factores etiológicos no son candidatos a la administración de nutrición enteral.La nutrición parenteral domiciliaria (NPD) es un tratamiento indicado a pacientes con insuficiencia intestinal, sin el cual verían seriamente mermadas sus expectativas de vida. Pese a ello existen complicaciones, tales como la disfunción hepática, que encontramos comúnmente en este tipo de pacientes que son sometidos a tratamientos con nutrición parenteral prolongada (NPP).La nutrición parenteral domiciliaria va a permitir que aquellos ciudadanos que la precisen puedan ser atendidos en sus domicilios evitan ingresos que generalmente sería muy prolongados y repetidos en el tiempo con el elevado coste que supondría para la sanidad pública, así como el desarraigo familiar que supondría no sólo para el paciente sino también para el cuidador principal, además de conllevar una interrupción de los procesos familiares.El primer caso de un paciente con NPD está muy bien documentado y fue dado de alta por Shils y cols. en el año 1967. El paciente padecía un síndrome de intestino corto secundario a una resección intestinal tras intervención quirúrgica por un tumor a nivel de intestino. La supervivencia de éste paciente fue de pocos meses, pero su caso permitió demostrar por primera vez que el tratamiento con NPD había sido posible.