Está demostrado en diversos estudios que los ASPECTOS GENERALES del cuidado y el tratamiento de los pacientes críticos tienen tanta relevancia como los ASPECTOS ESPECÍFICOS del tratamiento del motivo de ingreso. La eliminación del dolor y la ansiedad ha ido ganando interés en la Medicina Intensiva a medida que se han ido demostrando los aspectos deletéreos del dolor y la ansiedad sobre el paciente crítico, ya sea a través de repuestas fisiopatológicas como el aumento de catecolaminas (con generación de hipertensión arterial, arritmias), prolongando la estancia hospitalaria de los pacientes, o bien dificultando la aplicación de determinadas técnicas como la ventilación mecánica por la desadaptación o desconexión del respirador, etc. De este modo, se ha documentado una disminución de la morbimortalidad cuando los pacientes son tratados por personal médico y enfermería especializada en cuidados intensivos, al aplicar protocolos de ventilación mecánica adecuada o desconexión de la misma, cuando se mantiene un estricto control de la glucemia o cuando se aplican protocolos conservadores en las transfusiones sanguíneas. De igual modo, la APLICACIÓN DE UNOS PROTOCOLOS DE CONTROL ADECUADOS PARA LA ADMINISTRACIÓN DE SEDANTES Y ANALGÉSICOS han demostrado una reducción de la mortalidad y morbilidad con la consiguiente disminución del tiempo de estancia en UCI y hospitalaria, así como de los costes de ello derivados.